La vida en la casa de Labán
Jacob al darle de beber al rebaño de Labán que pastoreaba Raquel, hija de Labán, se baja a un nivel de sirviente. En génesis capítulo 29, en el versículo 15, Labán lo ve como sirviente, pese a que también lo veía como de su parentela. Esto, ya que Labán le pregunta, que siendo de su familia, cómo le iba a servir por balde, que significa servirle por nada, servirle gratis, ya que le había dado de beber a su rebaño. Labán lo estaba tomando como alguien para trabajar y le pregunta qué salario darle.
Jacob debió haber dicho que él no venía a trabajar por algo. Que venía a cumplir la bendición que tenía para su vida. Si bien en un comienzo, la dirección de su viaje es que huya por temor a que su hermano le quitara su vida, ir a la casa de Labán como lugar de refugio, Génesis 27:43-45, y Rebecca manipula a sentimentalmente a Jacob en el versículo 46 siguiente, para que en Génesis 28:1-2, Isaac direccionara a Jacob en su viaje a tomar por esposa de las hijas de Labán. Pero Dios se presenta ante Jacob, y le da una nueva dirección en su vida, en los versículos 13 al 15 siguientes de Génesis 28, que como ya hemos visto, Dios quería que regresara de las tierras de la casa de Labán, para darle las tierras de la promesa, que les prometió a su padre Isaac, y a su abuelo Abraham.
Pero no, Jacob no se pudo sostener en la bendición de Dios. Aún ha de haber estado rondando el temor por su hermano Esaú. Le pesaba más la palabra de su madre, que lo irían a buscar cuando el enojo de Esaú haya pasado, aún cuando su propia madre fue partícipe de las obras que desencadenaron el enojo de su hermanos, que las palabras de Dios, de que Él estaba con él, y cuáles eran las tierras y tremenda bendición de Dios tenía para su vida como generación de Abraham.
Aquí aparece:
- Aún cuando la Palabra de Dios me haya hablado directa y claramente en mi vida, para que venga ese propósito y bendición de los cielos, debo enfrentar algo en mi vida. Pero al no querer hacerlo, no entrar en una o más confrontaciones, como por temor, idearé caminos propios, obras, que me hagan pensar que "estoy haciendo algo" y que estoy en el camino del Señor. Que por terminar cansado haciendo ese algo cada día, "mantenerme obrando/ocupado", me estoy acercando a la meta que el Padre me ha puesto por delante, aunque en realidad no me estoy moviendo ni un poco y estoy literalmente estancado.
Y Jacob por la pregunta de su salario, toma el rol de obrero, de trabajador en la casa de Labán, y le dice que su paga fuera su hija Raquel, de la que él estaba enamorado, de la que por apariencia le gustaba más.
Ya había habitado un mes en la casa de Labán. En ningún momento al parecer Jacob se detuvo a hablar con Dios. Parece que la impartición generacional de la comunión con Dios que tenía Abraham, quien caminó y comió con Él, se fue perdiendo en la siguiente generación con Isaac, y aún más con Jacob.
Jacob llevado por las apariencias escoge a Raquel, y él mismo, para tenerla a ella, establece un período de servidumbre de 7 años. Ya Jacob había rendido parte de su vida fuera de los propósitos de Dios.
Es muy interesante, que tanto con Abraham como con Jacob, cuando dos personajes salen a sus encuentros a ofrecerles algo, Dios tiene antes un encuentro de comunión con ellos, donde los bendice.
Creo que cada vez que sale ante nuestro encuentro un enemigo poderoso, o aquel que parece verse amistoso pero que si le seguimos nos desviaremos de los propósitos del Padre, las piedras de tropiezo, Dios nos muestra que está ante nosotros, y nos lleva a tener un tiempo de intimidad en el que nos direcciona y bendice si estamos atentos a escuchar, para luego ser fieles para seguirlo.
Es interesante, tanto con Abraham como con Jacob, cuando experimentan a Dios, la Palabra no dice, no está escrito por ejemplo con Abraham, "Melquisedec salió a su encuentro". Dios ya estaba con ellos. Dios ya está con uno. Él es fiel y verdadero, es uno el que se desvía y se ciega para no verlo.
Y es que, no es "buscar a Dios", una frase que quizás muchas veces repetimos en nuestra vida cristiana. Dios siempre ha estado dispuesto por el hombre, de forma instantánea, no hacernos esperar, o "que le hallemos". Si somos sus Hijos, Él es Padre nuestro antes que Dios creador. Si el Padre, creador de todo lo visible e invisible, dio a su Hijo para que fuera inmolado desde antes de la fundación del mundo, y para que se humillara encarnándose hasta la muerte. Todo por nosotros. Es uno quien se tiene que humillar, reconocer que ha perdido tiempo con afanes de la vida, apagar las cosas del mundo (no que olvidemos nuestras responsabilidades como con nuestra familia), y volver a escuchar la voz del Padre para avanzar en su camino y no en los del mundo.
Con Abraham, el rey de Sodoma viene a su encuentro, pero antes Abraham está con Melquisedec, y recibe bendición, y no cae ante el trato del rey de Sodoma.
Con Jacob, Labán saldría a su encuentro, pero antes experimenta con Dios en un sueño, despierta sus dones de ver en el espíritu, y recibe dirección y bendición.
Pero Jacob a la hora del encuentro con Labán, cae ante el trato de Labán, no viendo con sus ojos espirituales que había despertado, sino dejándose llevar por las apariencias, sus ojos naturales, y olvida la promesa de Dios para su vida.
Y pasan los 7 años en la casa de Labán, esta tierra extranjera para las generaciones de Abraham. Y Labán engaña a Jacob y le pone a Lea por delante en la noche de su boda. Labán se excusa a la mañana siguiente, que por que era la primogénita, primero debía ir ella. Y Labán le ofrece a Raquel por otros 7 años adicionales de servidumbre, aunque en esta ocasión dándosela antes de este tiempo, pero que tuviera que pasar primero la "semana nupcial" con Lea.
Creo que aquí nos enfrentamos a varios problemas. No voy a entrar a detallar por qué Jacob se confundió de mujer en la noche. No se escribe mucho de ello. Quizás porque Dios realmente quería que Lea fuera su esposa y no Raquel. Y es que, los primeros 4 hijos que nacen vienen de Lea y no de Raquel, la mano Dios estaba con Lea al ser menospreciada, y a Raquel, Dios la deja estéril en este tiempo. Y más adelante veremos la poca fidelidad de Raquel con Dios, al confiar más en los ídolos, llevarse los terafines al salir de la casa de Labán, y morir a causa de este actuar.
Pero aquí hay otro problema que encontramos, y es que, el diseño de multiplicación en generaciones que nos da Dios, en Génesis 2:24, es que "abandonará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer y serán una sola carne." No habla de que el hombre se unirá a "sus mujeres", en plural. Jacob conocía la tradición oral de la Palabra de Dios, que es llevada de generación en generación, antes que fueran escritas propiamente tal. Jacob no tenía excusa para cometer semejante pecado. Él no podía ser una sola carne con más de una mujer. No puedo separar todo mi ser de esa forma. ¿Que a mi primera mujer le daré más de mi alma, y a la segunda y a las siguientes más de mi espíritu? No es un diseño de Dios. Como tampoco recibir de más de una mujer en el ser una sola carne. Todo esto causa gran daño.
Ya Jacob nuevamente no consulta a Dios por temas importantes en su vida, en este caso por cuál esposa tomar, y se deja llevar por las apariencias. Pero ahora que ya se había unido en una sola carne con Lea, se deja llevar por sus deseos carnales, transgrede la ley de Dios, y se une con más de una mujer a la vez; en vez de quizás, haberse quedado con solo una.
Es interesante el clamor de Lea con Dios. Parece que ella tenía más intimidad con Dios que el mismo Jacob. Por cada vez que Dios le da un hijo, Lea recuerda al Señor y lo alaba, y les da a sus hijos nombres con diseño. Estos son los primeros 4 hijos de Jacob con Lea, sus nombres y significados, y contexto en que los reciben. Muy importante esto último.
Nombre | Significado | Quién le da el nombre y su contexto |
---|---|---|
Rubén | "Mira, un hijo." | Lea - Dios ve su aflicción. |
Simeón | Escuchando. Que oye. | Lea - Dios escucha que es menospreciada. |
Leví | Unido. Adjunto. | Lea - Siente que ahora Jacob se sentirá ligado a ella. |
Judá | Alabado. Celebrado | Lea - Alaba a Dios. |
A Jacob se le conoce como el Padre de doce las tribus del pueblo de Dios. Si las doce tribus vienen de Jacob, es porque en Jacob estaban contenidos todos estos diseños, pero que en un principio, en la casa de Labán, Jacob nunca los pudo despertar; pero veremos de esto más adelante, ya que puede salir de la casa de Labán al despertar en él uno de estos diseños. Y por esto la importancia de los significados de los nombres de los hijos de Jacob.
Otro hecho importante que vemos: Llegado a este punto de llegarse a Raquel tras llegarse a Lea, podría entender que Lea tuvo un primer hijo con Jacob, ya que Labán le pidió que terminara su semana nupcial con ella antes de tener a su amada Raquel, pero en estos pasajes vemos que Jacob tuvo más hijos con Lea. No analizo esto en desmedro de Lea, pero Jacob no estaba poniendo en orden su propia casa. Ya habiendo transgredido la palabra de Dios que el hombre se unirá a su mujer, a una, y no a muchas mujeres, no lo hace solo una vez, sino que mantiene este comportamiento de tener más de una mujer como pacto de unión en una sola carne.
Los primeros 4 hijos, son en circunstancias que Lea busca de corazón al Señor ante las circunstancias que enfrenta, en una situación angustiante para ella. Lo primero que se despierta en su relación con Dios, es que Lea es consciente que Dios la ve y la oye, con sus dos primeros hijos. Con el tercero, viene una obra que Lea pide para su vida. Con el cuarto alaba a Dios. Con el tercer nacido que tuvo con Jacob, ya Lea podría tener una mejor relación con Jacob, o al menos como ella lo sentía en ese momento. Pero Dios le da más de lo que le pedía, y le da un cuarto hijo, y la respuesta de Lea es la mejor, alabar a Dios.
Aquí aparece:
- No existe una relación con Dios sin ver ni oír. Jesús dijo que Él vino a hacer lo que al Padre ve hacer, y habla lo que El Padre habla (lo oye).
- Dios nos dará aún más de lo que le pedimos. Sus diseños para nuestra vida son aún más grandes de lo que podemos imaginar. Como en el caso de Lea, uno le puede pedir hasta tres, pero Él nos quiere dar más y nos da cuatro y hasta más.
Génesis 29 termina con Dios cerrando la matriz de Lea. Creo que esto ocurre porque Jacob no ponía en orden su casa. Digamos, pensando que tuvo un hijo seguido de otro, hablemos que habrán pasado al menos unos 3 años y medio en que Lea concebía seguidamente, y Raquel era estéril. ¿Habrá sido esto una señal de Dios para que Jacob viera que Lea debía ser su mujer y no Raquel? Pero parece que Jacob aún se lleva por las apariencias, y no puede ver ni escuchar el plan de Dios, de quien era la mujer para su vida, y sigue "perdidamente enamorado" de Raquel. O se describa al menos, alguna intención de Jacob de consultarle su situación hasta este momento a Dios.
Dios puede ver el corazón del hombre, y ya veía lo que estaba creciendo en el corazón de Raquel al mantener Jacob esta doble relación por años, y ella no poder tener sus hijos. Ya Jacob tenía por experiencia familiar la crisis que causó que su abuelo Abraham se llegara a una segunda mujer cuando Dios no lo había permitido, no siendo fiel a la promesa que el Señor habló. Pero Jacob insiste en esta torcida doble relación por años.
Génesis 30 comienza con Raquel hablando a Jacob que tenía deseos de matarse, porque él no podía darle hijos. Jacob se excusa echándole la culpa a Dios. Creo que Jacob no aprendió nada de la experiencia de su abuelo Abraham al querer concebir hijos, ya que el momento de concebir, depende de la situación de la vida del hombre, y no un simple "capricho de Dios". Raquel entonces, como no podía concebir, le ofrece a su sierva Bilha, que significa tímida.
Dentro de los significados de los nombres encontrados hasta ahora, Labán significa "blanco", Raquel "oveja de Dios", y Lea "cansada".
Es interesante, Raquel le pide a Jacob que el hijo que dé a luz con su sierva, lo haga sobre sus rodillas para ser edificada por ella, ser edificada por medio de este nacimiento. Hay un misterio en ponerse en las rodillas de alguien. En Génesis 48:8-12, cuando Israel conoce a sus nietos, a los hijos de José, y los bendice como los suyos, los pone antes en sus rodillas. Génesis 50:23 nos muestra que parte de la descendencia de José, nacieron sobre sus rodillas mientras estuvo vivo. En Jueces 16:19, Dalila antes de cortarle las 7 trenzas a Sansón para que perdiera toda su fuerza, lo adormece en sus rodillas. También cuando Satanás tienta a Jesús en el desierto, dentro de lo que le pide a Jesús en la última tentación, era que se postrara ante él, doblara sus rodillas ante él.
Hay un diseño de traspaso de autoridad en las rodillas, y también de gobierno. Conocido ya es postrarse ante el Padre y el Hijo, en el que nos humillamos y reconocemos que toda honra, poder y gobierno, gloria y majestad, le pertenecen a Él. Raquel, por tanto, recibiría ser madre de los hijos de Jacob por medio de su sierva.
Y Bilha concibe por Raquel con Jacob dos veces, naciendo Dan y Neftalí. Raquel piensa que está en una lucha con su hermana, y que está venciendo. Raquel aún no puede dar hijos.
Lea copia el diseño de su hermana, y le da a Jacob su sierva Zilpa para llegarse a ella. Zilpa significa rocío como de fragancia, de mirra. Y da a luz a dos hijos de Jacob, a Gad y a Aser.
Aquí han ocurrido muchas cosas:
- La lucha de superioridad que tuvo Jacob con su hermano Esaú, se traslada con las hermanas Lea y Raquel luchando una contra otra por Jacob.
- La lucha de obtener la bendición de Dios, por medio de ideas/obras de hombre, que mostraba Jacob, las comienzan a expresar Lea y Raquel: "Dios me ha bendecido/bendecirá al hacer tal obra".
- Lea, que hasta al cuarto hijo reconocía a Dios por las bendiciones de haber concebido, ahora copia el diseño de su hermana para seguir concibiendo, aún cuando Dios mismo le había cerrado la matriz.
Esta lucha de hermanos de Jacob con Esaú, traspasada hacia la lucha de las hermanas, Lea con Raquel, es bastante interesante, y tiene que ver con el misterio en que "hombre y mujer serán una sola carne". Cuando el hombre se une en una sola carne con una mujer, llegan a ser uno, y se comparten mucho a nivel de espíritu, alma y cuerpo. Cada acto de unión en una sola carne, va consagrando mas y mas, la unión entre ambos, como uno solo, a nivel de espíritu, alma y cuerpo. A su vez, comparten, para bien o para mal, para bendición o maldición, todo lo de su vida y su hogar, al unirse en pacto, lo que hoy conocemos como matrimonio, pero que últimamente el pacto siempre es consumado en el acto sexual. Si un hombre carga con iniquidades, y no las ha solucionado, al unirse en matrimonio, la mujer también cargará dichas iniquidades. Así mismo, si uno tenía bendición financiera generacional, al unirse en matrimonio, su pareja también recibirá de esta misma bendición, al mismo nivel al ser ambos una sola carne.
En todo esto, lo que carga cada uno y que comparten al pactar y unirse en una sola carne, también hay un misterio: Existen también cargas de este tipo que son distintas pero compatibles, otras que se repelen una a otra, y otras en las que una anula a la otra, según la situación. Pero todo esto es otro tema, que debemos profundizar en el Espíritu Santo. Lo importante de exponer muy brevemente este tema, es que nos examinemos ante el Padre antes de entrar en pacto y "ser una sola carne" con la pareja que Dios me ha mostrado.
Esta lucha familiar que había estado viviendo Jacob con Esaú, sin ser solucionada, causando graves conflictos en su casa, de la cual termina huyendo, al unirse en una sola carne tanto con Lea como con Raquel, traspasa la arquitectura de este tipo de conflicto que tenía con su hermano Esaú, y genera, en la familia que estaba formando, un grave conflicto de lucha entre dos de una misma simiente.
Como también hemos visto, el uso de las siervas, viene a ser una "muletilla" del mundo para Lea y para Raquel, para hacer que opere, aquello que Dios no ha permitido. Y no las culpo por ello. Jacob debió de haber sido luz para esa familia, él era hijo de Abraham, hijo de la promesa, del llamado "padre de la Fe". Pero Jacob cae en las contrataciones de la casa de Labán, y cae en su cultura y tradiciones como tener muchas mujeres. Y, en todos los años en la casa de Labán, al menos hasta antes del nacimiento de su hijo José, no se registra que siquiera una vez Jacob haya adorado, o al menos dado gracias, a Dios por los hijos que había recibido. Ni menos hacerle altar de sacrificio como hicieron Abraham e Isaac. Es como si hubiera olvidado su experiencia con Dios antes de conocer a Raquel. No olvidemos que también Jacob estaba habitando en el lugar equivocado, las tierras de la promesa de Dios no estaban en la casa de Labán. También no olvidar que Labán era pagano, Jacob estaba en un entorno seguramente con ídolos, y ocurre el tema de los terafines por el que Raquel fallece que veremos más adelante.
Jacob cambia su paternidad, y adquiere una paternidad postiza con Labán, obrando en costumbres ajenas a la herencia de Fe recibida desde Abraham, y dejando de hacer lo que le agrada a Dios, la voluntad del Padre.
Hoy en día, hay muchos Ministros e Iglesias, que reciben promesas de Dios, pero que se encuentran en el lugar equivocado, no solo de lugar físicamente, y terminan abrazando la cultura del mundo y su forma de actuar. Todo ello para alcanzar metas a su manera, que en un principio sí, pudieron haber sido habladas por el Padre, pero que se fueron deformando con el tiempo al salirse del camino de Cristo, metas fuera de diseño que les colocan el título "es en nombre de Dios". Y caen en contrataciones.
En Chile, muchos Ministros que llegaron a ser grandes hombres en la Iglesia, e incluso muchos de ellos que llegaron del extranjero a la nación, creyendo que era el único camino para obtener autoridad en la nación, cayeron en las redes de la masonería, para ocupar ese poder para realizar obras en la nación, con muchas de ellas con un trasfondo hasta político. Y quizás todo esto con buenas intenciones, y para traer actos de justicia para el mundo cristiano y de todo el pueblo de la nación, pero cayendo en contrataciones con las tinieblas.
Más recientemente, en noviembre de 2019, en medio del "estallido social" en Chile, líderes de la Iglesia en Chile, se reunieron con la masonería, en una reunión con el "gran maestro" de la "gran logia" de Chile, Sebastián Jans Pérez. Dentro de los asistentes, se encuentra la pastora de la Iglesia Metodista, Raquel Riquelme, quien declaró por esta reunión que era un momento de unir voluntades, y como nos reporta la web de esta organización, granlogia.cl:
"Asistieron al encuentro el obispo, reverendo Jorge Cárdenas, el representante de la Iglesia Evangélica Presbiteriana en Chile, José Carvajal, el reverendo Marcelo Huenulef de la Iglesia Evangélica Luterana en Chile, la reverenda Raquel Riquelme de la Iglesia Metodista de Chile y Rectora Seminario Juan Wesley de la Iglesia Metodista de Chile, el reverendo Daniel Godoy de la Iglesia Evangélica Presbiteriana en Chile y Rector Comunidad Teológica Evangélica de Chile y Silvana Frontier, Vice presidenta administrativa de la Unión Iglesias Bautistas de Chile. Además participaron algunos integrantes de la mesa ampliada de entidades evangélicas y protestantes de Chile."
También, hay muchos de estos "líderes cristianos" que integran las filas de la masonería, y es algo histórico, no solo que ocurre en estos últimos años. Se debe entender también que quienes iniciaron la masonería, fueron cristianos, pero es un tema profundo que no se me ha dado profundizar en este libro. Lo que sí hay que tener en consideración, que la legalidad dada a las tinieblas para usar los diseños de Dios, ocurrió por primer vez con el rey David, cuando acepta las propuesta de edificar el templo con el rey de Tiro, quien traería sus arquitectos y materiales, plan que se ejecuta en la vida del rey Salomón; y este es el origen verdadero de la masonería, los descendientes espirituales de los arquitectos de Tiro, a quienes los del pueblo de Dios les entregaron la legalidad para entrar en sus tierras, y mezclar sus diseños paganos con los de Dios. Y este es un problema que se arrastra hasta el día de hoy con esta mezcla de "líderes cristianos masones".
Después de la reunión entre "líderes cristianos" y la masonería en noviembre 2019, por el "estallido social", en diciembre del mismo año, para trabajar junto con el gobierno ante esta situación social, representantes de las Iglesias luterana, bautista, presbiteriana, pentecostales y metodistas, junto a la "gran logia" de Chile, firmaron una declaración conjunta. En ella, nos describen brevemente sobre la asociación histórica de parte de la Iglesia cristiana con la masonería:
"Como información histórica, la Orden Masónica vio organizados sus principios básicos en 1723 por el presbítero protestante James Anderson; la vocación liberal de la Masonería favoreció la llegada a Chile de misioneros metodistas; existe una larga lista de metodistas masones en la historia, laicos y pastores; destacan en la Historia Universal personajes que, movidos por los valores e ideales de la masonería, han marcado el rumbo de las naciones: Abraham Lincoln, Benito Juárez, Bernardo O’Higgins, José Martí, Moisés Sáenz, Simón Bolívar, entre otros."
Más adelante, la declaraciòn alude a que no son una religión, y que aceptan todos los credos. Pero analizaremos un poco más adelante una de las declaraciones de uno de los "padres" de la masonería, Albert Pike, invocando a Lucifer como el dios verdadero de luz.
Muchos "cristianos" defenderán la masonería, y que ayudan a la gente, y es verdad, hacen varias acciones de ayuda para los pobres, pero esto no justifica pertenecer a una orden de tinieblas. No podemos servir a dos Señores, dice la Palabra. La Masonería inicia con un rito secreto, con juramentos colocando el corazón de uno en ellos.
O estos "cristianos" dirán que también en la masonería adoran a Dios, y que está la Biblia en sus reuniones, lo que en parte es verdad. Pero recordemos que aún los demonios creen en Dios y le temen, pero esto no significa que habitan en su luz. Y así como en sus reuniones tienen la Biblia, también en otras reuniones tienen la Torah, el Corán, u otro texto de creencias. Casi como a "gusto de todos los interesados". Pero hay un trasfondo en esto, y es que la adoraciòn última de la masonería, es al mismo Satanás.
El fin de la masonería es adorar al mismo diablo. Mario Escobar, en su libro "Historia de la masonería en Estados Unidos", detalla como Albert Pike, una de las bases de la masonerìa, "gran maestre del rito escocès", y co-fundador del ku-klux-klan, quien junto con Giuseppe Mazzini intercambiaron cartas comentando la creaciòn de un nuevo rito para la élite europea y estadounidense, para crear un tipo de círculo secreto dentro de la misma masonería que la gobernaría. Pike creó el "nuevo y reformado rito del paladín", y crea tres consejos, uno en Charleston, Carolina del Sur, otro en Roma, y un tercero en Berlín. Y en un documento con fecha Junio de 1889, cuyo título era "Asociación del demonio y de los iluminados de Pike", Pike daba una serie de instrucciones a los veintitrés consejos que ya existían del nuevo rito. En el documento decía: "A vosotros, instructores soberanos del grado 33, os decimos. Tenéis que repetir a los hermanos de grados inferiores que veneramos a un solo Dios, al que oramos sin superstición. Solo nosotros, los iniciados del grado superior, debemos conservar la verdadera religión masónica, perseverado pura la doctrina de Lucifer". La concepción de Pike, es que Lucifer es el dios de la luz, y que de la Biblia se debe dudar su historicidad, ya que lo ve como un libro esotérico que se interpreta.
¿Recuerdan el vistazo que vimos en el capítulo "La escalera de Jacob" del avivamiento de Valparaíso? De cómo desde dentro de la misma Iglesia vinieron los que apagaron este tremendo fuego de Dios que inundaba las calles de esta ciudad porteña. Este fuego no se debió de haber apagado, si todos los Ministros que se comenzaron a involucrar una vez iniciado el avivamiento, caminaban realmente con Dios, y no vivían como tibios, en una mezcla de luz y tinieblas; no hubiera habido oposición alguna desde dentro de la misma Iglesia. 2 Corintios 6:14-16 nos dice:
"14 No estéis unidos en yugo desigual con incrédulos, pues ¿qué compañerismo hay entre la justicia y la iniquidad? ¿Y qué comunión hay de la luz con las tinieblas? 15 ¿Y qué concordia del Mesías con Belial? ¿O qué parte del creyente con el incrédulo? 16 ¿Y qué acuerdo entre el santuario de Dios y el de los ídolos? Porque nosotros somos santuario del Dios viviente, como dijo Dios: Habitaré entre ellos y entre ellos andaré; Y seré su Dios, y ellos serán mi pueblo."
Y esto no es solo por la Masonería. Aunque sea otra organización que se declare hasta laica, ¿por qué como Hijos de Dios debemos unirnos a organizaciones humanas, cuyos líderes no son Hijos de Dios, y menos son guiados por la voz del Espíritu Santo? ¿Qué acaso nuestro Padre Dios no tiene poder. y debemos acudir a organizaciones del hombre caído para hacer Su obra y Su voluntad? Pero qué mentira más grande es esta. Solo Dios abre y cierra las puertas que uno necesite. Y a su Iglesia le entregó la llave del Reino de los cielos, para atar y desatar en el cielo como en la tierra, y las puertas del Hades no prevalezcan, como vemos en Mateo 16. Ya con Cristo tenemos todo para obrar en la voluntad de nuestro Padre.
Esto no significa que como Iglesia, en el proceso de ser luz y sal para la tierra, no podamos trabajar en conjunto con organizaciones del mundo, si el Padre nos lo muestra en su diseño; por ejemplo con organizaciones que abogan por los derechos de los niños. Pero distinto es, llegar a la posición, en que pienso que no puedo avanzar más en la obra del Padre, ya no trabajando en conjunto, sino en el que me tengo que unir a una organización del mundo, aceptando sus preceptos, creencias, visión-misión, juramentos, etc..., como parte de mi vida, saliéndome de los caminos del Padre, y callando en el proceso la voz del Espíritu Santo.
Si crees que estás cayendo en las manos de alguna organización del hombre caído, aún es tiempo; ¡aún estás vivo, alégrate que nuestro Padre es misericordioso, y a nuestro defensor Cristo Jesús tenemos en los cielos, en la corte del Padre que es sobre toda corte! Pero actúa como Cuerpo de Cristo, y no en solitario, pidiendo ayuda y ministración a algún presbiterio de la ciudad o de la nación.
En el Reino de Dios no existe la frase "el fin justifica los medios". Puedo tener muy claras las promesas de Dios en mi vida, y cuál es la obra que Dios me ha dado para hacer, y hasta dónde y cuándo hacerla. Pero si en el medio para operar, y/o las herramientas que utilice para iniciar, desarrollar y/o terminar esa obra, caigo en contrataciones con lo que Dios no quiere que me una, entrar en yugo desigual, habré errado en el blanco. Y esa obra que pienso que es para Dios, se volverá estéril, y muy probable que dañe a la Iglesia, y en consecuencia a toda la nación. Como bendecir en nombre de Dios a quien no debo, como un político que luego se vuelva en contra de los ciudadanos de la nación. Porque nuestro Dios no es un Dios de mezclas de luz y tinieblas, por eso el Padre aborrece a los tibios.
Entonces, si Dios no ha permitido algo, podemos caer en utilizar "muletillas", como Sarah, Lea y Raquel, con sus siervas. Pero Dios es misericordioso, y aún cuando Abraham utiliza una sierva, da un camino de salida con bendición.
Y así también, Dios es misericordioso con todos los Hijos de Jacob, aunque esta no era la forma que Dios quería. Y que no era diseño de Dios lo vemos en los resultados, la muerte pronta de Raquel por ejemplo, y en propias palabras de Jacob, sus días que fueron pocos y malos. Tristes fueron los días de Jacob. Termina siendo padre de las 12 tribus de Israel, pero el camino recorrido es con mucho dolor, usando de estas "muletillas", como también el "ser negociador" que ya vimos, no apoyándose en lo que Dios le había dado.
Y, ¿no han sido angustiosos los años de vida de la Iglesia en Chile? Teniendo las llaves del Reino de los Cielos, siendo llamados a ser Hijos de Dios, la nación aún parece vivir las heridas de una terrible dictadura, y otras heridas que se arrastran por siglos que se remontan hasta al colonialismo, desigualdad económica, entrando a la década del 2020 con un estallido social. Con una división tremenda con miles de "denominaciones cristianas" registradas, con más denominaciones por cantidad de habitantes que cualquier otro país del mundo. Tantas denominaciones, todas llamándose ser la verdadera Iglesia de Cristo, la que tiene la última revelación, y no hay unión entre ellas. ¿Y es que Cristo tiene varias esposas, no es solo una? ¿Y no es este el mismo problema de Jacob, que llega a tener tantas esposas? El que tenga oídos para oír, oiga.
Y es que, ¿La Iglesia de la nación, no ha utilizado por décadas, y hasta siglos, de estas muletillas? ¿No seguimos unidos, o al menos sin denunciar, las contrataciones de la Iglesia con grupos de tinieblas como la masonería? ¿No nos comparamos y "luchamos" una "denominación cristiana" con otra, viendo quien tiene más "el favor de Dios", quien es el "más cercanos a Dios", a como Lea y Raquel luchaban por buscar quien habitaría finalmente con Jacob? ¿No es esta última actitud la que sigue teniendo la Iglesia de la nación, la que hizo que Lea y Raquel usaran los medios que no venían de Dios, las muletillas del mundo, y la Iglesia sigue cayendo en contrataciones que Dios aborrece? El que tenga oídos para oír, oiga.
Y estos son los nuevos hijos de Jacob que hemos visto:
Nombre | Significado | Quién le da el nombre y su contexto |
---|---|---|
Dan | Juzgar | Raquel - Interpreta que Dios la ha juzgado. |
Neftalí | Mi lucha | Raquel - Siente que ha vencido en la lucha con su hermana Lea. |
Gad | Buena suerte/fortuna | Lea- Siente que ha llegado la ventura, la dicha, la felicidad. |
Aser | Feliz/bendito | Lea - Siente felicidad porque iban a reconocer su bendición. |
Luego en el relato de Génesis capítulo 30, llegamos al versículo 14 en adelante. Vemos un nuevo episodio entre la lucha de Lea y Raquel por Jacob. Raquel quiere las mandragoras que Rubén había ido a recoger para su madre Lea.
La mandragora es una planta que por miles de años ha sido usada como alucinógeno, analgésico, afrodisíaco y droga para la fertilidad (reportaje "La mandrágora: la manzana de Satán que cura y mata", de la BBC.com, 26/07/2015).
Recordemos que en este punto, tanto Raquel como Lea, tienen su matriz cerrada. Al parecer, Lea vuelve a utilizar muletillas del mundo, ahora con esta planta con propiedades de fertilidad. Y por esto Raquel le ruega a Lea por estas plantas, llegando a negociar una noche con Jacob, fríamente, como si él fuera un producto. Es interesante este punto. Lea ya se acostaba con Jacob, si tuvo 4 hijos seguidos con él. Pero parece que esto cambió, una vez que su matriz fue cerrada. No está registrado bien lo que ocurrió, por que aún Jacob se acostó con la sierva de Lea. Pero en este punto, lo que podemos ver claramente, es que, por lo que expresa Lea, Raquel le habría quitado a su esposo, y ya Lea no podía acostarse con él, y por eso Raquel le vende a Lea una noche con Jacob por las plantas.
Es interesante la reacción de Lea. Se ve que esas plantas eran preciadas, y quizás escasas, además del tema de la fertilidad. La casa de Labán no era un lugar pobre, vemos que tiene rebaño y sirvientes, por lo que llama la atención que Raquel ruegue por estas plantas. Pero el amor de Lea por Jacob es mayor, y deja las preciadas plantas por quien amaba.
Lea se termina acostando con Jacob tras la negociación, y Dios escucha a Lea y le abre su matriz, dando a luz a Isacar. No se escribe que la escucha porque ella le dio su sirvienta a Jacob para tener más hijos, sino que es escuchada tras dar las plantas preciadas por Jacob; pero Lea termina pensando que fue por el suceso con la sirvienta. Ya con esto, Lea no necesitaría mas "permisos" de Raquel, y se llega nuevamente a Jacob y tienen un nuevo hijo, a quien llama Zabulón, viendo que como le había dado a luz a seis hijos gracias a Dios, tenía buen dote, y ahora Jacob habitaría con ella. Después Lea da a luz por séptima vez y nace Dina.
Luego de esto, se describe que Dios se acuerda de Raquel. En el versículo 22 de Génesis 30 vemos que dice que oyó a Raquel; se ve que Raquel oró a Dios, algo cambió en ella en su relación con Dios. Y Dios abre su matriz. Ocurrió algo, que Raquel reconocería con este nacimiento. Raquel da a luz y dice: "porque Dios ha quitado mi afrenta", y nombra a su hijo José. Afrenta en hebreo es chepah, que significa injuria, desgracia, vergüenza. Esto Raquel lo siente recién en este momento, y no antes, cuando su sierva le daba hijos a Jacob.
Los siguientes hijos de Jacob que hemos visto:
Nombre | Significado | Quién le da el nombre y su contexto |
---|---|---|
Isacar | "Él traerá recompensa." | Lea - Dios le ha dado su recompensa |
Zabulón | Morada, casa, hogar. | Lea - Su marido habitaría con ella |
Dina | Justicia. | Lea - No se registra contexto, solo que es el último y séptimo concebimiento de Lea |
José | Dios añade. | Raquel - Dios se acordó de ella |
Todos los episodios vividos entre las dos hermanas hasta este momento, en esta lucha que originan, y con el involucramiento de sus siervas, no es culpa en origen de ellas, es culpa de Jacob. La descendencia de Abraham se había extraviado. Aún antes de llegar a encontrarse con Raquel, en el camino Jacob experimenta a Dios y recibe propósito y bendición de Él, pero Jacob pierde su rumbo en la casa de Labán.
Vive en casa de Labán bajo una contratación por un salario, por quien amaba por las apariencias. Se acuesta con cualquiera, en cualquier orden, ni siquiera decidido por él mismo, sino decidido por Lea y Raquel según las circunstancias. La semilla de las generaciones de Abraham estaba callada. En todo el capítulo 29 y el 30, desde que Jacob pasa la semana nupcial con Lea, hasta que nace su hijo José, se registra solo una vez a Jacob hablar, y es nada mas ni nada menos, que para echarle la culpa a Dios por lo que estaba viviendo, y por algo que era su culpa como hombre carnal por no poner en orden la casa que se estaba formando en su seno, ya que Jacob tenía la luz como generación de Abraham, y no les fue de luz.
Jacob pasa más de una década en este estado, mientras envejece con un propósito de Dios que parece haber olvidado..., olvidado hasta el nacimiento de su hijo José, donde algo despierta en Jacob, y ve que es la hora de salir de la casa de Labán.